viernes, 6 de septiembre de 2013

El Rey Federer abdica

Roger Federer está viviendo su peor temporada como profesional desde que está en el Top 10 de la ATP. La temporada ha visto a un Federer atípico, falto de ritmo que incluso decidió hacer una pausa de dos meses para estar con su familia y poder desconectar mentalmente de los esfuerzos a los que está expuesto un deportista de alto nivel. Esta pausa había venido motivada por una aparente falta de confianza del jugador, quien después de hacer semis en el Abierto de Australia, un resultado que tapaba, en parte, las carencias que se habían visto en 2012 en el juego del helvético. Sigue teniendo problemas en el golpe de revés, algo que aprovecha Rafa Nadal para arrasarle en la final del Master Series de Roma, y algo que otros jugadores empiezan a aprovechar, ya que Federer adolece de constancia y de paciencia a la hora de afrontar los golpes de revés, su punto débil a lo largo de su carrera, que sin embargo había sabido minimizar con su ágil golpe de derecha y su precisión a la hora de ejecutar los golpes. Pero Federer aún no había tocado fondo, el fondo le esperaba en Wimbledon, su torneo talismán (junto a Halle) y al que llegaba tras haber vencido en Halle. En Wimbledon cae sorprendentemente ante el ucraniano Sergiy Stakhovsky, un jugador de perfil bajo que nunca había inquietado al jugador de Basilea. Este momento pareció ser el punto de inflexión decisivo en la carrera de Roger, o se recuperaba o se hundía definitivamente. Los peores augurios se confirmaron cuando Roger, tras una mala actuación en la gira americana (no jugó en Montreal)pierde con el español Tommy Robredo en cuarta ronda del Abierto de Estados Unidos. Robredo nunca había ganado a Federer, tenía un 0-10 adverso, pero le bastó ser agresivo para acabar con un reloj suizo sin precisión, que cometió innumerables errores y que volvió a mostrarse como un jugador en plena decadencia al que ya ha visitado Father Time, como gusta decir al mundo anglosajón. La derrota podría haber sido minimizada si Robredo hubiera demostrado contra Nadal que lo de Federer no fue flor de un día, pero al ser aplastado por el tenista balear se demostró que lo de Roger fue algo inexplicable y grave y que deja muy contra las cuerdas al antiguo número 1 del mundo. El resto del año dirá si Federer puede volver a ser lo que fue, pero nada pinta bien en casa del tenista de Basilea, al que le costará volver a ganar un torneo en el que haya jugadores del Top 5.

Nadal X de París

Rafa Nadal ganó su 10º Roland Garros, convirtiéndose en el primer tenista que gana 10 o más veces un torneo de Grand Slam, añadiendo este l...