El próximo domingo 25 arranca una nueva edición de la NBA. Después de todas las controversias habidas en los últimos meses en torno al cierre patronal, la mejor liga del mundo podrá arrancar, eso sí, en una versión reducida de 66 partidos al término de los cuales comenzarán las eliminatorias. Sobre el papel destacan las plantillas de Miami, Boston y Chicago por el Este y las de Oklahoma, Lakers, Clippers, Dallas y Memphis en el Oeste, a falta de que algún equipo pudiera mejorar por el traspaso de Dwight Howard.
Miami mantiene el mismo eje del año pasado pero se ha reforzado con Battier y Edy Curry, con lo que la plantilla es algo mejor que el año pasado, veremos si hay química o si el trío calavera se lleva otra decepción más. En Chicago continúa ese núcleo fuerte que estuvo cerca de llevar a los Bulls a unas finales, pero hay que destacar la incorporación del ex jugador de Pistons, Richard Hamilton, quien debería mejorar el tiro exterior del equipo. Con Rose, Noah, Gibson, Brewer, Luol Deng o Korver este equipo no debería bajar de las 45 victorias, lo contrario sería una mala temporada regular. El otro contendiente del este será Boston que, a pesar de la edad, tiene calidad para dar un susto a más de uno. Continúa ese cuarteto mágico con Allen, Pierce, Garnett y Rondo y han incorporado al potente Brandon Bass quien debería dotarles de más poder interior. Sufren un varapalo con el problema cardíaco de Jeff Green que le mantendrá de baja todo el año.
En el oeste la gran sorpresa son los Clippers. El señor Sterling está empezando a aflojar la chequera para rodear a Blake Griffin de un equipazo. Un equipo supertalentoso, con un trío de bases de escándalo (alguno debería salir) como son Mo Williams, Chauncey Billups y Chris Paul. Por dentro mandan Griffin, Deandre Jordan, pierden a un interior de garantías como era Kaman y a un tirador como Gordon, pero ganan a un tirador fiable, si las rodillas le respetan, como es Caron Butler. Buen equipo que lo hará muy bien. Sus vecinos los Lakers han perdido a dos jugadores básicos como Odom y Brown y han traído a tres secundarios que podrían ser interesantes como McRoberts, Troy Murphy y Kapono. Lo demás sigue igual, cambio en el banquillo donde Phil deja paso a Mike Brown. Veremos si éste hace como en Cleveland, donde su único sistema era balones a Lebron. Mucho deberá cambiar LA para optar al anillo, pero al menos las semis se deben lograr.
Dallas ha perdido a Tyson Chandler, Butler y a Barea, pero consigue a Odom en una operación a priori rentable. Su juego interior es endeble, solo cuentan con Brendan Haywood y Odom y la llegada de Carter aportará más espectacularidad que otra cosas. Aún así, el armazón sigue intacto y los Nowitzky, Kidd, Terry, Peja seguirán dando mucha guerra. En cuanto a los Grizzlies y los Thunder, hablamos de los dos últimos grandes aspirantes a plantarse en las finales. Son dos equipos jóvenes que estarán muchos años en la élite si mueven bien sus piezas. Oklahoma es el gran favorito a destronar a Dallas, con una plantilla muy buena, donde destacan Durant, Harden, Ibaka,Nate Robinson, Westbrook, el defensor Sefolosha y el tirador Cook. Por dentro, Ibaka, Perkins, Mohammed y Collison darán mucha guerra y sellarán su tablero. Los Grizzlies completan el quinteto de aspirantes en el oeste. Las renovaciones de Gasol y Randolph dotan al equipo de un potente juego interior, acompañado además del veterano Skinner y de Darell Arthur. Como bases destacan Mike Conley y Greivis Vaszquez y por fuera tienen una batería importante, con Tony Allen, Rudy Gay, OJ Mayo y Jeremy Pargo.
Estos deberían ser los equipos que se disputaran el título de la NBA, si se colara algún otro equipo en esta lista y ganara el anillo, sería una gran sorpresa. Que empiece el espectáculo
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