El Giro de Italia parece que ya tiene un claro ganador, se llama Alberto Contador. El ciclista de Pinto ha arrasado en la trilogía de los Dolomitas. Se esperaba mucho de los ciclistas italianos en esta edición del Giro, de hecho se había dicho que tanto Nibali, como Scarponi y Basso eran los grandes nombres para ganar "la Corsa rosa", pero no contaban con el empuje de un Contador que, una vez abstraído de los rumores de dopaje, ha vuelto a demostrar que sólo tiene un rival en el mundo del ciclismo, el luxemburgués Andy Schleck. Las etapas de los Dolomitas respondieron a las expectativas. La primera de ellas acabó en Austria, en la montaña más alta del país. Se trataba del temible Grossglockner. En esta subida realizó Contador la primera de sus tres exhibiciones. En plena subida arrancó y permitió que el venezolano Rujano, una de las revelaciones del Giro junto al francés John Gadret, ganara su primera etapa en el Giro. Lo más importante para Contador fue que sus dos grandes rivales, Scarponi y Nibali, hicieron aguas. Una vez acabada esta etapa de aperitivo, a los ciclistas les esperaba la segunda etapa de los Dolomitas.
Esta segunda etapa contaba con dos grandes subidas, la subida al terrorífico Monte Zoncolan y la peligrosísima subida al Crostis, una subida con una bajada en la que podía haber muerto algún ciclista. Esta subida se canceló y nos quedó una etapa con menos dificultades de las que se suponían. El español Igor Antón consiguió imponerse y situarse momentáneamente en la tercera plaza de la general. Contador volvió a atacar fuerte en el Zoncolan y a sacar tiempo a todos sus rivales, que veían como éste iba con una marcha más.La subida del Zoncolán tenía más de un 11,6% de pendiente media en 10 km, una auténtica muralla. El protagonismo de Euskaltel no se acabó aquí, ya que en la última etapa de los Dolomitas, con final en Val di Fassa, previo paso por la Marmolada, fue vencida por el español Mikel Nieve, uno de los grandes nombres del ciclismo español. Contador volvió a ser agresivo y contraatacó a un ataque del siciliano Nibali, el cual había atacado en el descenso. Contador deja visto para sentencia el Giro a la espera de las dos etapas de los Alpes y de las dos cronos.
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